Esta es
la famosa frase atribuida a Nicolás Maquiavelo (1469-1527) que parece ser que
nunca dijo, pero según los estudiosos sí que indica bastante bien su pensamiento,
en especial el recogido en su obra más conocida el Príncipe (1531).
Bueno,
y a qué viene esto a cuento. Viene a raíz de la esplendida película LINCOLN (Steven
Spielberg 2012), una lección de historia plasmada en imágenes, interpretada
magistralmente por Daniel Day-Lewis. Parece que estamos viendo a Lincoln vivo. Spielberg
nos narra los últimos cuatro meses de la vida del presidente (de enero a abril
1865), en especial el turbulento mes de enero de 1865, en el que se somete a
votación la enmienda a la Constitución sobre la abolición de la esclavitud. Y
Lincoln tiene que elegir si seguir adelante con su enmienda o poner fin a una
guerra civil.
Ignoro
si Abraham Lincoln había leído a Maquiavelo, pero sus decisiones en ese periodo
histórico tienen bastante de Maquiavelo, el fin justifica los medios. Esta es
una lección de aprendizaje enorme que nos ofrece la película. Hay más lecciones
de aprendizaje que nos ofrece este filme. Veamos:
- El ya mencionado el fin justifica los medios. Tenemos ocasión de aprenderlo en dos ocasiones. En una, a Lincoln le faltan 22 votos para que su enmienda salga adelante. No duda en dar orden de que “se compren” esos votos a diputados demócratas que han perdido las elecciones y se quedarán sin trabajo. Para recibir su apoyo en la votación les ofrecen puestos públicos. La otra, es la dura decisión que hay que tomar, o seguir adelante con la enmienda o acabar la guerra civil. Si pone fin a la guerra civil antes de la votación la misma no saldrá adelante, los estados esclavistas del Sur volverán al congreso y con sus votos impedirán que la enmienda prospere. El consejero personal de Lincoln se lo advierte “no se puede tener todo, hay que elegir”. Lincoln elige la enmienda y prolonga la guerra civil durante tres meses más.
- Cuando las cosas se complican mucho el líder baja a la arena. Les faltan unos 8 votos para conseguir que la enmienda sea aprobada. Lincoln se arremanga y contacta con esos diputados tratando de convencerles y lograr su compromiso, con razonamientos políticos y morales.
- Aparece el ahora tan famoso en España “no me consta”. Se va a producir la votación de la enmienda en el Congreso. Pero alguien la interrumpe diciendo que parece ser que Lincoln está negociando con representantes rebeldes el fin de la guerra. Piden, para poder seguir la votación, una declaración formal del Presidente al respecto. Van a buscarla y Lincoln de forma muy elegante les manifiesta algo parecido al actual “no me consta”
- Hay que saber ceder en lo superfluo para conseguir lo importante. Hay un congresista, antiesclavista hasta la médula (papel interpretado por Tommy Lee Jones) que quiere ir mucho más allá con los logros de la enmienda (igualdad racial, derechos civiles, voto.etc). Le aconsejan, ante su última intervención en la Cámara que por favor no mencione la igualdad racial de los negros, solo la igualdad civil. Así lo hace. Cede parte de sus pretensiones. Y así no ahuyenta a los indecisos.
La
enmienda que abolía la esclavitud en USA salido adelante a finales de enero de
1865, con el voto a favor de los 2/3 de la Cámara de Diputados. Se dio un
vuelco a la historia y USA empezó a aprovechar las cualidades, el talento y la
capacidad de 4 millones de personas que pasaron a ser libres. Si bien se tardo algo más de 100 años para que
los negros vieran sus derechos civiles totalmente respetados. Ya se sabe, una
cosa son las leyes y otra el cambio de comportamiento del ser humano. Este
tarda mucho más
La vida
y mucho más la política nunca se escribe con renglones rectos. Hay que meter
borrones entremedio para conseguir objetivos importantes. Que levante la mano
el que esté libre de culpa. Yo en esta ocasión, sin dudarlo, me apunto al “fin
justifica los medios”.
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